Viviendo con una persona con alzheimer. Una cocina segura.
La Enfermedad de Alzheimer, al igual que los otros tipos de Trastornos Neurocognitivos Mayores (Demencias), alteran el comportamiento de las personas afectadas. Además de los síntomas cognitivos, como la pérdida de memoria, existen otros síntomas que se conocen como Síntomas Neuropsiquiátricos. El paciente puede desorientarse, tener alteraciones del juicio que no le permitan detectar situaciones de peligro o tornarse agresivo con los demás. Es fundamental adecuar el hogar para que sea un lugar seguro para el paciente y para las personas que los cuidan y viven con él. Estas adecuaciones dependerán de la etapa en la que se encuentre el paciente.
Algunos consejos para que su cocina sea un lugar más seguro para usted y para su familiar con Alzheimer:
- Instale un detector de humo en la cocina. De esta forma si el paciente olvida que está cocinando algo, el detector de humo le avisará y evitará que se produzca un incendio.
Son fáciles de localizar en nuestro país, en áreas de ferretería. De fácil instalación, usualmente utilizan baterías y cuestan menos de $10.00
- Instale perillas de seguridad en la estufa para evitar que su ser querido encienda la estufa y ocurran escapes de gas.
Son fáciles de localizar en nuestro país, en áreas de ferretería. De fácil instalación, usualmente utilizan baterías y cuestan menos de $10.00
- Instale perillas de seguridad para niños en los lugares en donde guarda productos de limpieza, fósforos, utensilios punzo cortantes como los cuchillos y electrodomésticos peligrosos.
Son fáciles de localizar en nuestro país, en áreas de ferretería. Existen varios modelos. Son de fácil instalación y uso. Precio promedio menos de $10.00
- Retire las frutas artificiales, la sal y los condimentos del mostrador de la cocina. Retire cualquier imán de refrigeradora con forma de alimentos.
El paciente puede ingerirlos pensando que son reales.
- Controle la cantidad de alimentos (galletas, dulces, frutas, etc.) que deja al alcance de su ser querido. En ocasiones no controlan la cantidad de alimentos que ingieren.
La ingesta excesiva de alimentos puede afectar su salud.
Adecuar el hogar para acoger a una persona con un Trastorno Neurocognitivo Mayor como la Enfermedad de Alzheimer, hace que el hogar sea más seguro, la convivencia sea más agradable y ayuda a evitar la sobrecarga del cuidador.